Los intercambiadores de calor se diseñan y fabrican para facilitar la transferencia indirecta de calor entre dos fluidos, que pueden ser dos líquidos o un líquido y un vapor. El intercambiador de calor de carcasa y tubos se divide en dos zonas principales, la zona de los tubos y la de la carcasa
Los principales componentes de los intercambiadores de calor son: carcasa, tubos, placas tubulares, deflectores, vástagos de sujeción y espaciadores y canales.
Se trata de una carcasa cilíndrica que puede fabricarse utilizando una placa conformada o una tubería.
Estos tubos pueden ser simples, pero también puede aumentarse la superficie de transferencia de calor añadiendo pliegues, para lo que se utilizan tubos con aletas o corrugados.
Las placas tubulares sirven para sostener los tubos por ambos extremos. Cuentan con agujeros por donde se introducen los tubos, que se fijan en la placa mediante soldadura o por expansión mecánica o hidráulica.
Los deflectores sirven para soportar los tubos de forma que se mantenga un espacio libre entre ellos y para dirigir el flujo de fluidos a través de la carcasa de acuerdo a los requisitos del diseño.
Los vástagos de sujeción y espaciadores sujetan los deflectores y los mantienen a la distancia deseada. Un extremo de los vástagos de sujeción se fija a una placa de tubos y el otro al último deflector.
Los canales o boquillas contienen y guían el fluido que circula en la zona de los tubos.
Los intercambiadores de calor de carcasa y tubos se utilizan como condensadores, hervidores, calentadores de proceso y evaporadores de película descendente.